El carbonero José con mascarilla 3d en su Carbonería de la Calle Parra nº2. Última carbonería de Sevilla es un comercio de barrio que construye tejido social.
Artesano del carbón, ni Luis es exclusivamente un vendedor ni sus compradores simplemente son tales.
Para él, lo atractivo es lo “pintoresco” del local y de la actividad que genera el local que se convierte en espacio de convivencia: vecinos y paseantes que entran a preguntar, a comprar carbón o bombonas, a solicitar o devolver favores, a fotografiar… Como respuesta a las amenazas que se ciernen sobre la carbonería un grupo de amigos y allegados ha apoyado la creación de una asociación en 2018. La Asociación Científico-Cultural Cisco de Picón, soportada por unos 120 socios, organiza cada domingo recitales de poesía, presentaciones de libros, emisiones documentales o de películas, charlas de divulgación científica, eventos gastronómicos.