Los esfuerzos titánicos de nuestro sistema sanitario y de sus profesionales está logrando sacar adelante a miles de pacientes. Así lo va confirmando el número de altas médicas. Lamentablemente y a pesar de que los datos estadísticos permiten albergar cierto optimismo, el virus se sigue cobrando vidas a diario. Ese es sin duda el lado más amargo de esta crisis, la pérdida de todas esas personas que no han logrado superar la enfermedad. Crematorio del cementerio de Torrero, Zaragoza.