Ana, 36 años, nació en Raval, donde pasó toda su infancia. Tiene dos hijos, de 9 y 13 años, a quienes no puede ver por diferentes razones. Trabajaba como empleada en un hipermercado, así como en una carnicería. Durante la dura confianza en Barcelona conoció a Raúl, de 39 años, y el amor surgió inesperadamente. Duermen en una tienda de campaña junto a la estación de bomberos de Montjuich, Barcelona. Su sueño es poder alquilar un pequeño apartamento para vivir. Por desgracia, la crisis económica en la ciudad de Barcelona deja pocas oportunidades para acceder a un empleo. Esta es una evidencia de la emergencia social detrás de la crisis de salud que estamos experimentando en Barcelona, España.