Una trabajadora habla por teléfono enfundada en plásticos y bolsas de basura como protección frente al coronavirus, en el interior de una residencia de ancianos, en Sabadell. La falta de recursos y asistencia por parte de las autoridades a las residencias y centros de mayores obligó a los profesionales a idear precarios sistemas de protección con los que proteger a los residentes y a ellos mismos del virus.