La pandemia de COVID-19 ha generado una situación de vulnerabilidad en muchas familias. Para hacer frente a esta realidad los vecinos del barrio del Raval se organizan a través de la Xarxa Popular d’Aliments del Raval. Durante el confinamiento repartieron comida a más de doscientas cincuenta personas cada semana y, aun así, llegaron a tener una lista de espera de más de quinientas. En la imagen, dos jóvenes de la Xarxa Popular d’Aliments del Raval recorren los comercios del barrio para recoger esa comida que no se puede vender, pero que aún se puede comer para añadirla a los lotes que reparten a familias y vecinos. Mucha gente depende de eso para aguantar, semana a semana, el confinamiento domiciliario. La Xarxa Popular d’Aliments del Raval huye del asistencialismo y trabaja para generar una red donde todo el mundo pueda participar en hacer crecer este proyecto, empoderándose así a los vecinos del barrio y generando una dinámica solidaria fundamental para luchar contra el aislamiento social.